lunes, 2 de julio de 2012


DEFINICIÓN    
La Diabetes Mellitus es un grupo de enfermedades metabólicas caracterizadas por hiperglicemia, consecuencia de defectos en la secreción y/o en la acción de la insulina. La hiperglicemia crónica se asocia en el largo plazo daño, disfunción e insuficiencia de diferentes órganos especialmente de los ojos, riñones, nervios, corazón y vasos sanguíneos.

CLASIFICACIÓN
En 1997 la Asociación Americana de Diabetes (ADA), propuso una clasificación que está vigente. Se incluyen 4 categorías de pacientes y un 5º grupo de individuos que tienen glicemias anormales con alto riesgo de desarrollar diabetes (también tienen mayor riesgo cardiovascular):
1. Diabetes Mellitus tipo 1
2. Diabetes Mellitus tipo 2
3. Otros tipos específicos de Diabetes
4. Diabetes Gestacional
5. Intolerancia a la glucosa y glicemia de ayunas alterada


Diabetes Mellitus tipo 1:
Caracterizada por una destrucción de las células beta pancreáticas, deficiencia absoluta de insulina, tendencia a la cetoacidosis y necesidad de tratamiento con insulina para vivir (insulinodependientes). Se distinguen dos sub-grupos:
Diabetes autoinmune: con marcadores positivos en un 85-95% de los casos, anticuerpos antiislotes (ICAs), antiGADs (decarboxilasa del ac. glutámico) y anti tirosina fosfatasas IA2 e IA2 ß. Esta forma también se asocia a genes HLA.
Diabetes idiopática: Con igual comportamiento metabólico, pero sin asociación con marcadores de autoinmunidad ni de HLA.


Diabetes Mellitus tipo 2:
Caracterizada por insulino-resistencia y deficiencia (no absoluta) de insulina. Es un grupo heterogéneo de pacientes, la mayoría obesos y/o con distribución de grasa predominantemente abdominal, con fuerte predisposición genética no bien definida (multigénica). Con niveles de insulina plasmática normal o elevada, sin tendencia a la acidosis, responden a dieta e hipoglicemiantes orales, aunque muchos con el tiempo requieren de insulina para su control, pero ella no es indispensable para preservar la vida (insulino-requirentes).


Otros tipos específicos de diabetes:
Incluyen pacientes con defectos genéticos en la función de la célula beta como las formas llamadas MODY (maturity onset diabetes of the young); otros con defectos genéticos de la acción de la insulina; otros con patologías pancreáticas (pancreatectomía, pancreatitis aguda, pancreatitis crónica, neoplasia del  páncreas, hemocromatosis); endocrinopatías (Cushing, acromegalia, glucagonoma, feocromocitoma).
También algunos fármacos o tóxicos pueden producir diabetes secundaria (corticoides, ácido nicotínico, Lasparagina, interferón alfa, pentamidina); agentes infecciosos (rubeola congénita, coxsachie B, citomegalovirus, parotiditis) y por último, algunas otras enfermedades como los Síndromes de Down, Kleinefelter, Turner, enfermedad de Stiff-man y Lipoatrofias. En estos casos se habla de diabetes secundarias, mientras los tipo 1 y 2 son primarias


Diabetes gestacional: 
Se caracteriza por hiperglicemia, que aparece en el curso del embarazo. Se asocia a mayor riesgo en el embarazo y parto y de presentar diabetes clínica (60% después de 15 años). La diabetes gestacional puede desaparecer al término del embarazo o persistir como intolerancia a la glucosa o diabetes clínica


Intolerancia a la glucosa y glicemia de ayuna alterada:
La Intolerancia a la glucosa se caracteriza por una respuesta anormal a una sobrecarga de glucosa suministrada por vía oral. Este estado se aocia a mayor prevalencia de patología cardiovascular y a riesgo de desarrollar diabetes clínica (5-15% por año).
Glicemia de ayuno alterada se caracteriza por el hallazgo de una glicemia de ayuno entre 100 y 125 mg/dl. Su identificación sugiere el realizar una prueba de sobrecarga de glucosa oral, para la clasificación definitiva.



sábado, 9 de junio de 2012



Alteraciones psicológicas
Los trastornos emocionales constituyen las alteraciones psíqucas más comunes en la población general. Según Golberg el 14-18% de la población general padece depresión y/o ansiedad clínicamente significativas aunque sólo el 7 al 9% acuden a consultar a los médicos de atención primaria, que constituyen sin duda los primeros interlocutores del paciente ansioso o deprimido. Desgraciadamente, sólo son identificados correctamente el 3-4% de los casos.la experiencia clínica sugiere que muchos pacientes que acuden a recibir tratamiento en los servicios de medicina general o en las consultas psiquiátricas muestran una mezcla de síntomas ansiosos y depresivos de diversa intensidad.Además, muchos estímulos psicosociales pueden generar estrés emocional, el cual a su vez puede afectar a os sistemas hormonales, autónomo, inmunológico y endocrino. Hormonas como las catecolaminas, neurotransmisores cerebrales que ayudan a regular la presión sanguínea, la frecuencia cardiaca y los niveles de glucosa en la sangre son significativos en cuanto a la vinculación entre los aspectos psicológicos y la salud. Las conductas, los hábitos como tabaquismo, alcohólicos, o dieta inadecuada han sido asociados con algunas enfermedades. Esto generó la inquietud de crear un nuevo campo de estudio; la psicología de la salud y la medicina conductual; que como cualquier campo de estudio de surgimiento reciente tiene problemas para definir las funciones de sus participantes. La ambiguedad de la función y los conflictos de jerarquía principalmente con la profesión de medicina generan dificultades definitorias. Sin embargo en el momento actual la psicología de la salud constituye un campo consolidado.

Psicología y Diabetes

En el inicio de la mayoría de las enfermedades endocrinas pueden encontrarse síntomas que hacen pensar en enfermedades psiquiátricas; de igual forma, algunos pacientes con enfermedades depresivas o anorexia nerviosa pueden presentar determinadas anomalías que hacen pensar en una enfermedad endocrina-metabólica. Los trastornos psiquiátricos en estas enfermedades se han relacionado con anormalidades en el metabolismo de los neurotransmisores (noradrenalina, dopamina y serotonina) en el cerebro y se considera que desempeñan un papel fundamntal en la síntesis y liberación de las hrmonas hipotalámicas e hipofisiarias.se ha determinado que las características de la personalidad influyen en el control de la glicemia en diabéticos tipo 2. La tendencia de los pacientes a experimentar menos emociones negativas y el enfocar las necesidades de los demás ante de las de ellos mismos demostró ser un factor de riesgo para el inadecuado control de glicemia. Existen evidencias preliminares, que características comunes de personalidad pueden explicar las variaciones en el control de la glicemia en pacientes con diabetes tipo 2, bajo las mismas condiciones de tratamiento. Los peores controles de l glicemia se han asociado con ansiedad, depresión, rabia, hostilidad, autoconciencia y vulnerabilidad. Así mismo, se ha observado una mayor propensión a experimentar emocines negativas, gran tendencia a las preocupaciones, experiencias de enojo y frustración; culpa tristeza, dessessperación y un inadecuado manejo de estrés. Sin embargo, las fuertes tendencias a la frustración y a experiemntar emociones negativas puede preveer el incremento de la motivación de los pacientes con diabetes a cumplir regímenes de autocuidado.


viernes, 1 de junio de 2012


Los Síntomas de la Diabetes.
Ambos tipos de diabetes producen una diversidad de síntomas entre los cuales se encuentran sed y hambre constantes, y una excesiva producción de orina.  En la diabetes tipo I también se puede producir una significativa pérdida de peso.
Las Causas de la Diabetes
Al parecer existe un fuerte factor hereditario que predispone hacia ambos tipos de diabetes.  Sin embargo, como ocurre con muchos factores hereditarios la presencia de factores ambientales puede proveer las condiciones adecuadas para que esta predisposición se manifieste o por el contrario puede ayudar a evitar que la condición se produzca.  La obesidad y el consumo excesivo de grasas son factores precipitantes en la diabetes tipo II.  Se sospecha que en ambos tipos de diabetes, pero particularmente en la diabetes tipo, I pueden estar involucrados procesos autoinmunes.  Estos son procesos en los que células del sistema inmunológico que debieran ir destinados a atacar virus o bacteria, atacan nuestro propio cuerpo.
Alternativas Naturales Contra la Diabetes
La meta en el tratamiento de la diabetes es reducir y mantener a un nivel adecuado el nivel de azúcar en la sangre.  La alimentación es un factor primordial para lograr esta meta.  El ejercicio, ciertos suplementos nutricionales, y la práctica de la relajación y meditación también ejercen efectos positivos para controlar la diabetes y para evitar los daños ocasionados por la misma.
Alimentación
Reducción del consumo de grasas - En un estudio publicado en la revista Diabetes Care de enero de 1994 se encontró que un incremento moderado en el porcentaje de calorías derivadas de la grasa (del 38 al 43 porciento) era suficiente para aumentar significativamente la cantidad de personas con intolerancia a la glucosa que desarrollan diabetes.  Por otra parte se ha encontrado que ingerir 40 gramos de grasa adicionales cada día puede hacer seis veces más probable que una persona con predisposición a la diabetes la desarrolle.  La dieta típica por lo general es demasiado alta en grasa.  Sin embargo no todas las grasas son iguales.  Las grasas saturadas son las que más problemas causan y son precisamente estas las que muchas personas consumen en exceso.  Es recomendable reducir el consumo total de grasas de modo que no representen más del 20 porciento del total de calorías.  Las grasas ingeridas deben ser preferiblemente no saturadas.
Otras recomendaciones alimentarias  
Algunas recomendaciones alimentarias que pueden ser de utilidad para todas las personas que padecen de diabetes o que están en un alto riesgo de padecerla son:
v  Incrementar el consumo de carbohidratos complejos, es decir aquellos derivados de vegetales, granos integrales y aunque en menor cantidad, frutas frescas.  Estos carbohidratos tardan más en digerirse que los azúcares simples y liberan sus azúcares naturales de forma más lenta y controlada que los productos hechos a base de azúcares refinados.
v  Aumente el consumo de vegetales de colores intensos como el brócoli, la espinaca, la zanahoria y el pimiento ya que estos son ricos en antioxidantes que ayudan a prevenir los daños causados a los pequeños vasos sanguíneos de los ojos.
v  Elimine el consumo de azúcar refinado y los productos hechos a base de éste.  Por ejemplo, dulces, galletitas y golosinas en general.
v  Evite la comida "basura" es decir la que contiene muchas calorías vacías pero muy pocos nutrientes o fibra.
v  Reduzca o elimine el consumo de cafeína, alcohol y cigarrillos.  El fumar es especialmente dañino para las personas diabéticas ya que estas son susceptibles a daños a los pequeños vasos sanguíneos que suplen a los ojos y a los nervios periferales.  El cigarrillo agrava estos daños.  El alcohol aumenta los riesgos de daños a los nervios periferales.
v  No coma demasiado en una sola comida.  Es preferible comer menos en el almuerzo o la cena e ingerir alguna merienda ligera entre comidas.
v  Reduzca el número total de calorías
Suplementos
Además de las recomendaciones generales sobre la dieta ya esbozadas, existen algunos suplementos que pueden ayudar a prevenir la diabetes tipo II o a evitar que esta condición empeore.
Cromio - este mineral ayuda a incrementar la actividad de la insulina.  La deficiencia de cromio es sumamente común.  El alto consumo de productos hechos a base de azúcar refinada agravan la situación ya que este tipo de azúcar roba al organismo de sus abastos de cromio.   Existen estudios que demuestran que una deficiencia de cromio en la dieta afecta negativamente la tolerancia a la glucosa.  Un estudio llevado a cabo en el hospital de Beijing en China demostró que un grupo de personas en las primeras etapas de la diabetes tipo II que recibió una dosis de 100 miligramos de cromio dos veces al día durante cuatro meses disminuyó significativamente su nivel de azúcar en la sangre.  En este estudio se empleó una forma de cromio conocida como picolinato.  Algunas buenas fuentes de cromio son los mariscos, los cereales integrales, el jugo de uva, la levadura de cerveza, los mariscos y las habichuelas.
Magnesio - las deficiencias de magnesio pueden alterar el metabolismo de la glucosa y contribuir a los daños causados por la diabetes.  Algunos de los resultados de una deficiencia crónica de cromio son alta presión arterial, pérdida ósea, enfermedades vasculares.  Algunos investigadores incluso sugieren que un bajo nivel de magnesio en la dieta puede ser un factor que precipite ambos tipos de diabetes en personas susceptibles.  Algunas buenas fuentes de magnesio son los albaricoques, los guineos, los granos íntegrales y el salvado de trigo.
Potasio - el potasio ayuda a aumentar la producción y la eficiencia de la insulina.  Alimentos ricos en potasio son los guineos o bananos, las papas, los productos lácteos y los granos integrales.
Vitamina B6 - esta vitamina ayuda a aumentar la eficiencia de la insulina.  También ayuda a prevenir la retinopatía diabética, una de las principales causas de la pérdida de visión en las personas diabéticas.  El nivel de vitamina B6 tiende a ser bajo en las personas mayores de 50 años.  Algunas fuentes alimentarias de vitamina B6 son el pescado, el pavo, los aguacates, el brócoli, las papas, los pimientos rojos y las nueces.
Vitamina E - la vitamina E actúa como antioxidante y también posee propiedades como anticoagulante.  Además ayuda a metabolizar mejor los azúcares.  Puede ayudar a prevenir la arterioesclerosis y las complicaciones vasculares comunes en las personas diabéticas.  Estas complicaciones son responsables de los daños a los riñones y los ojos causados por la diabetes.
Vitamina C - ayuda a reducir la necesidad de insulina, prevenir problemas vasculares y mantener la salud de los ojos.
Plantas medicinales - existen varias plantas, como la bardana y el fenogreco que poseen la capacidad de reducir los niveles de glucosa en la sangre.  Sin embargo, ninguna es un sustituto para la administración de insulina.   La utilización de estas plantas en personas diabéticas sólo debe hacerse bajo el cuidado profesional ya que en ocasiones pueden ocasionar un descenso rápido en el nivel de azúcar.
Por otra parte, existe un buen número de plantas que no alteran significativamente el nivel de azúcar en la sangre pero poseen propiedades sumamente valiosas para la prevención y el tratamiento de las complicaciones de la diabetes.  Dos de estas son:
Arándano (bilberry) - Ayuda a evitar la destrucción de los pequeños vasos sanguíneos del ojo conocida como retinopatía diabética que ocasiona la pérdida de visión en pacientes diabéticos.  (Más información sobre el arándano).
Ginkgo Biloba - Aumenta la circulación en los pequeños vasos sanguíneos, especialmente en los del cerebro.  En el caso de las personas diabéticas los problemas circulatorios en las piernas son frecuentes y pueden incluso culminar en amputaciones.  El ginkgo ayuda a mejorar la circulación en las piernas, contribuyendo a prevenir estos problemas.
El Ejercicio
El ejercicio ayuda tanto a prevenir la diabetes en personas que están a riesgo, como a evitar muchas de las complicaciones en las personas que ya la padecen.  Investigaciones llevadas a cabo en la Universidad de Tufts en Massachusetts indican que el ejercicio aeróbico regular reduce el riesgo de desarrollar diabetes aun en los casos en que no produzca pérdida de peso.  Otros estudios demuestra que las personas diabéticas que se ejercitan con regularidad tienen un tienen un riesgo menor de muerte que las que no se ejercitan.  Una de las formas en que el ejercicio ayuda es incrementando el nivel de cromio en los tejidos.  Otra es mejorando la capacidad del organismo para utilizar la insulina disponible.
El ejercicio con pesas o de resistencia también ayuda.  Este ejercicio incrementa la masa muscular.  Puesto que el músculo requiere más calorías que la grasa el resultado es un aumento en la tasa metabólica.  Es decir se queman más calorías, lo que hace más fácil bajar de peso, algo que es deseable para la gran mayoría de quienes padecen de diabetes. Las personas con buena masa muscular también son menos susceptibles a desarrollar diabetes ya que a mayor masa muscular menos cantidad de insulina se necesita para llevar la glucosa de la sangre a los tejidos.
Relajación y meditación
Cualquier tipo de práctica que ayude a controlar el estrés será de gran ayuda tanto para prevenir la diabetes como para evitar los daños causadas por esta.  La meditación, el yoga, la hipnoterapia, y la musicoterapia son algunas de las modalidades que pueden ser practicadas con gran beneficio. (Más sobre la relajación y la meditación y sobre la musicoterapia).